10 de marzo de 2009

466 aniversario del traslado de la Ciudad de Santiago al Valle de Panchoy

Luego de la catástrofe en Almolonga, de avalanchas de tierra y lodo el 11 septiembre de 1666, en la cual muere la Gobernadora Doña Beatriz de la Cueva, los sobrevivientes necesitaban un nuevo lugar donde vivir

Se debía decidir cual sería el futuro de la Ciudad de Santiago y conseguir un lugar un lugar alejado del volcán.

Se pensó en trasladarse al Valle de Tianguis = Valle de Chimaltenango.

El Ingeniero Juan Bautista Antonelli hacía un trabajo de la Corona, para establecer los mejores lugares para ser utilizados como fortalezas, y le piden la opinión de si es adecuado el lugar, al evaluar las opciones recomienda que se haga el traslado a Panchoy.
Por algunas razones:

Abundancia de manantiales de agua previendo el crecimiento de la ciudad
Sitio protegido por las montañas de los vientos alisios
Cercanía de ríos lo que da un mejor ambiente para la ciudad

Se le cambió el nombre al Volcán de Cunacú ahora el Volcán de Agua.

El Cabildo revisó el anterior acuerdo, el cual revocaron ya que el traslado ser realizaría a el Valle de Panchoy.

Todo esto se decidió un 10 de marzo de 1543.

En Panchoy no existía un asentamiento previo, era un terreno virgen.

Antonelli aplica las Leyes de la corona española y realiza un trazo ajedrezado, el cual le da el orden de las calles, además cuando la ciudad es trazada ya había concluido lo militar, por lo que no existen calles bloqueadas.

Ciudad es considerada administrativa en el ámbito civil y eclesiástico.

Por lo que se comienzan a establecer las órdenes religiosas que le dan un carácter singular y que se manifiesta en arquitectura variada.

También fue un gran escenario en donde el pensamiento barroco se expresó.

Al inicio las edificaciones eran sencillas, la primera catedral de la ciudad fue la Ermita de Santa Lucía.

Con el tiempo fueron cambiando las edificaciones.

Siempre se menciona y se cree que las grandes obras de edificación fueron hechas por trabajadores de la península ibérica, aunque participaron varias personas, Antonelli el encargado del trazo en el siglo XVI, Luis Díaz de Navarro, Diego de Porres, entre otros.

Por lo que ahora Antigua Guatemala es un gran crisol tanto de cultura latina de España y culturas milenarias aborígenes mesoamericanas, ciudad mestiza culturalmente, en donde los antigüeños herederos de este legado debemos tener como reto... CUIDARLA.


Éste pequeño extracto fue tomado de una entrevista en la radio al Señor Enrique Berdúo, Historiador de Antigua Guatemala.

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